Evangélicos piden libertad de culto

Amalia Avendaño

San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, 17 de febrero.— Indígenas de distintas comunidades de los Altos de Chiapas, que solicitaron la intervención de la Secretaría de Pueblos Indios (SEPI) del gobierno del Estado para agilizar la busqueda de soluciones a los problemas agrarios, políticos y religiosos que enfrentan en los municipios de Zinacantán y Huixtán, hicieron un reconocimiento al importante avance que se ha logrado en San Juan Chamula donde “no se registran conflictos por las creencias religiosas”.

“Chamula: aprobado, Zinacantán y Huixtán: reprobados en libertad de culto” expresaba una cartulina que portaba una de las mujeres del más de un centenar de tsotsiles que desde hace 34 días duermen a la intemperie en la explanada del palacio de Justicia desplazados por grupos católicos tradicionalistas.

Los manifestantes que solicitaron audiencia con el titular de la dependencia Jesús Caridad Aguilar, aseguraron que podrían “mover” su plantón a la sede de la SEPI al tiempo de reclamarle a la dependencia que siendo de atención a indígenas “no nos de ni un kilo de azucar o un poco de café, en esta nuestra lucha por nuestros derechos”.

Esdras Alonso González, de la iglesia Alas de Aguila, reconoció que es ejemplar el caso de San Juan Chamula, que fue el municipio que más expulsados arrojó en decadas pasadas y ahora conviven sanamente evangélicos y católicos, aseguró que se ha logrado edificar más de 100 templos de religiones distintas a la católica.